La franquicia, un negocio con experiencia que resiste en Ecuador.

El coronavirus no ha podido detener a un modelo de negocio dinámico

Ecuador se convierte en uno de los principales referentes empresariales del continente

La franquicia llegó a Ecuador para quedarse. Esa afirmación resulta clave para entender porque este modelo de negocio sigue siendo protagonista principal dentro del mercado empresarial local a pesar de las obvias dificultades vividas por la pandemia que asola a todo el mundo.

La clave principal para entender que la franquicia cuente con una arraigada tradición en el país, ya que sus beneficios son muy relevantes para el emprendedor a la hora de llevar a cabo la inversión; menor riesgo de inversión al ser un negocio ya probado (tiene el know how, "saber cómo"), se apalanca en la marca y en su marketing, tiene procesos ya estandarizados.

Esta situación de estabilidad y progreso que ofrecen las franquicias a nivel empresarial en Ecuador se apoya en otras circunstancias que son también relevantes y que convierten a este modelo de negocio en un escaparate perfecto para desarrollarse empresarialmente. Por ello, en este sentido, debemos apuntar que otra de las claves que propician el crecimiento de las enseñas que componen este sector la encontramos en el auge y el gran protagonismo que están teniendo las nuevas tecnologías y el e-commerce.

Esta situación está siendo muy protagonista en las estrategias comerciales de las principales compañías, pero se ha acentuado aún más con la llegada de la pandemia. Se puede decir que es uno de los pocos sectores que están creciendo aupados por la llegada de esta crisis sanitaria que tanto está afectando al mundo entero.

La franquicia en Ecuador se está revelando como uno de los grandes referentes empresariales del país, un hecho muy importante por las dificultades que se presentan en tiempos difíciles de pandemia.